No es la motosierra, es que se acabó el amor.

Llevo algunas semanas absorto con las manifestaciones pre-campaña y sigo sin salir de mi asombro.

Afirmaciones cómo

“La reforma de la constitución asegura el estado del bienestar”.
“Con la reforma de la constitución no estaremos en mano de los mercados”.
“Nunca el BCE ha planteado una exigencia de reforma de la Constitución”.
“No había tiempo para convocar un referéndum”.
“PP/PSOE son la motosierra de ……..”

Nos han salpicado, en boca de unos y otros, estas últimas fechas.

Cierto es que, al menos, han estado presentes en el Congreso de los Diputados en temporada estival (moreno fantástico la mayoría y cara de poca preocupación todos ..... la crisis no va con ellos, va con los sufridores / la inmensa mayoría).

Pero haría falta saber, a todos los ciudadanos, cuánto ha costado el sainete.

Si, un auténtico sainete aunque pretendan darle aires de acontecimiento histórico.

Quiénes nos han llevado al precipicio, quiénes han gastado sin mesura, quiénes han transgredido letalmente los dictados de la propia Constitución (la desmesura de cargos y gastos, de empresas públicas, corporaciones, Radios y Televisiones públicas, no vienen impuestas constitucionalmente, son obra de los políticos – muchos de ellos, como el sprinter, llevan 30 años influyendo en el desaguisado como para venir ahora con recetas mágicas)  se erigen ahora, interesadamente, en los salvadores.

De no haberse pasado siete pueblos nada de esto hubiese resultado necesario.

Pero está claro que cometer tropelías a “tutiplén” durante tanto tiempo iba a causar, en algún momento, un estropicio de consecuencias incalculables.

Adelgazar la administración, quitarle grasa, eliminar empresas públicas, eliminar los cargos a dedo, emprender inversiones necesarias y posibles (no polideportivos, piscinas, ……, que luego no pueden mantenerse, sencillamente para comprar votos), evitar duplicidades (o más que duplicidades) ……. debiera hacerse siempre, no sólo en época de crisis.

Recuerdo nuevamente la ponencia de Enrique Fuentes Quintana en la primera edición de la Universidad Internacional Illa del Rei, del mismo modo que recuerdo el libro “El futuro del estado del bienestar” de José Luis García Delgado y otros autores o de forma más sarcástica, menos rigurosa tal vez, pero muy cierta en bastantes aspectos el libro “Las autonosuyas” de Vizcaíno-Casas.

De aquellos polvos estos lodos.

No me vengan ahora con historias por favor.

Sin haber reformado la constitución pero gestionando correctamente y en beneficio del interés general, no estaríamos en la UCI como estamos en la actualidad.

El penúltimo país europeo en el hit de la tasa de desempleo es Letonia con apenas el 16%.
España sobrepasa holgadamente el 20%.

Hemos tenido una temporada turística histórica a decir de casi todos los operadores y apenas se ha creado empleo.

Ya va siendo hora de ponerle el cascabel al gato y para ello es preciso (a mi entender)

- reestructurar el sistema, de arriba abajo o viceversa, modificando la constitución en aquellos aspectos – como el electoral – que acerquen las decisiones a la ciudadanía

- el actual sistema de partidos es pernicioso a todas luces

- aplicando la responsabilidad patrimonial a los políticos (hemos visto demasiados atropellos en los últimos años, cómo para que se vayan de rositas con los entuertos (les sale barato el paso por la cárcel a la mayoría)

- fomentar una administración eficaz, cercana y útil, eliminando duplicidades sin que ello conlleve trastocar el estado de las autonomías

- eliminar, de verdad, trabas a los emprendedores fomentando la economía productiva en lugar de la economía subsidiada

- eliminar las prebendas de organizaciones empresariales y sindicales

-   la sanidad, la educación y los servicios sociales son sagrados ( los coches oficiales, las dietas, los dirigentes digitados, las fiestas y caterings, …. NO LO SON – RECORTEN DE AQUÍ)
-  debemos modificar el sistema productivo (la construcción no es la panacea ni mucho menos y está claro que el turismo tampoco / debemos volver al equilibrio de nuestros sectores productivos)
        
…………….

No sigo para no calentarme más.

Por cierto ya apuntaba Salvador Allende, en 1972, en manos de quién estamos (cómo para negar quién obliga a quién en este mundo que hemos convertido en monstruoso para beneficio de unos pocos).

En mi paseo matutino de ayer con Boss, con una temperatura ideal  escuché una alocución suya.

Recomendable escucharla en youtube
http://www.youtube.com/watch?v=dd99k8jcJHc

Tomo prestado una parte del título de esa joven del 15M, no es la crisis es que se acabó el amor, al que hacia referencia Millás en una columna en el DM.

No nos vengan Uds. con historias,  ya no nos ponen ¡¡¡

Feliz día

SAlut